DEBEMOS SER MÁS CREATIVOS AL BUSCAR MEDIDAS PARA EL PATUDO
“Varias opciones se barajan para la toma de decisiones con miras a reducir el esfuerzo pesquero sobre el atún patudo y para ello creo que se debería ser más creativo y no pensar solamente en aumentar los días de veda o el cierre de la pesca”, señala el Dr. Martin Hall, biólogo y jefe del Programa de Captura Incidental y del Programa Internacional para la Conservación de los Delfines de la CIAT.
La Comisión Interamericana del Atún Tropical deberá reunirse en octubre próximo en La Jolla, California, para analizar alternativas por adoptar encaminadas a reducir las capturas de atún patudo.
Situación de recursos
Martin Hall, quien desde 1984 colabora en la CIAT, explica que de las tres especies de atunes que se pescan en el OPO, el barrilete, que es el más importante en volumen, está en condiciones bastante buenas y no necesita de medidas, en tanto que el atún aleta amarilla está en una condición que se está deteriorando, mientras que el atún patudo está ya en una condición de deterioro, por lo que requiere de la adopción de medidas.
En la reunión de la CIAT de junio se empezaron a discutir las opciones, se presentaron alternativas que al parecer a los participantes no les pareció que cumplieran las expectativas o funciones que ellos querían ver cubiertas, dice Hall, al tiempo que subraya que se propuso reducir en una cantidad muy grande la captura de atún patudo, cosa que no se la ha podido hacer durante mucho tiempo y que ahora se la propone hacer de un solo golpe.
Medidas más creativas
Sobre la propuesta de aumentar de 62 a 87 los días de veda, subraya que son cosas que se trabajan en la sección de evaluación de stocks de la CIAT, donde hay gente bastante competente, pero lo que uno hubiera querido ver eran otras alternativas y no solo la de querer aumentar los días de veda.
Menciona que se puede pensar en otras alternativas como la de una cuota total al atún patudo y que una vez que se llega al límite se cierra la pesca. Así también se puede poner límites a la pesca sobre objetos flotantes o a toda la pesca, son opciones de manejo y a veces tienen que ver más con la factibilidad que con la ciencia, según agrega.
Destaca que también se puede pensar en mantener la medida actual, esto es la veda de 62 días, y tomar medidas adicionales como cuotas globales por países o por barcos, al igual que cierres temporales de zonas de pesca.
Evitar impacto social
Nunca se sabe si extender la veda a 87 días podría ser fatal para la flota y las industrias, pero eso sería otro paso más respecto a la inhabilidad de resolver los problemas, dice el científico de la CIAT, quien subraya que se puede cerrar tres meses, luego ocho meses y después decidir que solo se pesca en noviembre y diciembre, pero entonces ¿qué pasaría con los cientos de millones de inversiones en barcos y plantas y el empleo de cientos de miles de personas en las costas?
“No se pueden tomar decisiones tan fáciles como la extensión de los cierres de pesca, creo que debe haber una búsqueda más creativa de soluciones que no ocasionen tanto impacto social”, enfatiza.
Aumento del registro
Martin Hall se refirió también al aumento en el registro de la capacidad, señalando que la flota norteamericana no está toda activa, no hay 30 barcos nuevos pescando en nuestra región, hay solo algunos pero la cosa es limitada.
“Yo diría que los norteamericanos están usando de la cuota de 25 mil toneladas solo alrededor del 15%, y tal como están las cosas escritas podrían venir esos barcos, pero si ellos consiguen condiciones favorables para seguir pescando en otra zona no habrá ningún problema acá en el OPO”, concluye.
